sábado, 9 de junio de 2012

Cata de VIÑA VENTISQUERO / Academia de Sommelier de Venezuela


Hay ciertas experiencias que invitan nuevamente a escribir, sin duda alguna, esta es una de ellas. Hoy les voy a relatar la cata que desde Chile, Viña Ventisquero presentó en la Academia de Sommelier de Venezuela,   a través de su representante comercial, para deleitarnos con su más alta gama de vinos. Después de una explicativa descripción de sus viñedos, su equipo enológico y de toda su linea de vinos, abrimos boca con dos vinos blancos exponentes intermedios de la línea Ventisquero Reserva, que resultaron muy logrados. 1ro se sirvió el Chardonnay Reserva 2010, de color amarillo dorado pálido con destellos verdes claros, de  entrada mineral, con agradables y elegantes aromas a frutas tropicales como el mango y la piña madura, a copa agitada se fusionan con aromas de miel, vainilla y tostado, que provienen de la guarda en barrica, es estructurado en boca, con acidez suave y equilibrada, ligero, fresco y fácil de tomarse, persistente en boca, dejando un final suave y elegante a frutas. Ideal para acompañar a pescados magros, carnes blancas, quesos o simplemente como aperitivo. Muy Bueno! De 2do se sirvió un Sauvignon Blanc Reserva 2011, color amarillo pálido cristalino, con destellos verdes claros, de aroma complejo y elegante, es una mezcla de frutas cítricas y tropicales, lima, pomelo, piña y pera, complementado con suaves notas florales y toques minerales,  en boca es elegante, tiene una acidez equilibrada y un final en boca mineral que le da complejidad. Elaborado 100% directo en los tanques de acero inoxidable, no tiene paso por barrica. Es ideal como aperitivo o para acompañar ensaladas o cebiches. Muy rico! De 3ro seguimos con un Pinot Noir Reserva 2010, proveniente del Valle de Casablanca, de un color rojo granate y destellos rubí, con aromas a frutos rojos frescos, como cereza, frutilla, con algunas notas a vainilla provenientes de la crianza en barrica. En boca es muy fresco, con acidez balanceada, taninos suaves,  con una permanencia media en boca, donde se sienten nuevamente en retrogusto las notas a frutas frescas, vainilla y algo de especias. Ideal para acompañar carnes blancas, aves de caza y pastas. Luego pasamos al 4to de la noche: Merlot Reserva 2010, de color rojo rubí, con destellos violeta, es un vino complejo y especiado, resaltan las frutas rojas maduras como ciruela, con toques de pimienta, nuez moscada y canela, clavo de olor, algo de vainilla y chocolate, con estructura y acidez equilibrada, final largo y especiado en retrogusto.  Ideal para quesos suaves y pastas. De 5to seguimos con un Carmenérè Reserva 2010, color rojo cereza y destellos rubí-violeta, con aromas intensos de frutas negras y rojas maduras, moras, frambuesas, frutillas, cerezas, pimentón rojo leve, flores secas, con notas especiadas y algunos toques de chocolate y tabaco. En boca resaltan los frutos, de cuerpo muy equilibrado y taninos aterciopelados, le dan un final elegante. Ideal para acompañar un cordero, carne de cerdo, platos a base de cremas y pastas. Continuamos de 6to con un Cabernet Sauvignon Reserva 2010, de un color violeta oscuro y aromas de gran intensidad, donde se mezclan los frutos rojos maduros, berries, moras, arándanos, notas especiadas como la pimienta negra, vainilla, chocolate, tabaco y una madera muy fina. En boca destaca su gran cuerpo, una buena extracción y acidez equilibrada, de taninos maduros con estructura compleja y larga permanencia en boca. Uno de mis preferidos de la noche y que me sorprendió muchísimo, porque la mayoría de los Cabernet Sauvignon que he tenido la oportunidad de probar, terminan dejándome un final amargo y vegetal en boca… desencuentros que culminaron anoche con este extraordinario Cabernet Sauvignon Reserva Ventisquero. Es la  armonía perfecta para un cordero, costillar de cerdo y platos especiados. Aquí terminamos con los Ventisquero Reserva y pasamos a la línea Ventisquero Queulat, envejecidos 100% en barricas francesas, que muestra todo el potencial de la cepa en cada una de sus 7 variedades, destacando de esta manera el concepto de equilibrio perfecto. Cada variedad tiene su personalidad propia, proveniente del estudio y la elección del terroir mas adecuado, con lo que consiguen un equilibrio entre la madera y fruta, que combina la sutiliza y fuerza del ventisquero Queulat, el más impresionante ventisquero colgante de Chile. La línea Queulat la comenzamos catando un Merlot Gran Reserva 2009, con una crianza de 12 meses de barrica, del fundo Trinidad en el Valle del Maipo, de color rojo rubí con destellos violeta, aromas a fruta confitada, cereza, ciruela seca, algunas notas de nuez moscada, clavo, vainilla, chocolate, de acidez equilibrada y taninos elegantes, tiene larga permanencia en boca. Lo armonizaría con un asado de tira y puré con hierbas y especies, preparaciones con carne y tomate, pastas. Continuamos la cata de la linea Queulat con un Syrah Gran Reserva 2009, de color rojo rubí profundo, densidad media alta, con aromas a frutos negros maduros, arándanos, moras, notas de especies como pimienta negra, tabaco, chocolate y tostados. Concentrado en boca, sabores envolventes, estructurado, complejo y persistente. Vino ideal para disfrutar con tiempo a lo largo de una comida. Lo armonizaría con carnes de cacería, cerdo en todas sus formas, cordero, jamones, charcutería, quesos ahumados. Continuamos la cata y cambiamos a la línea Ventisquero Grey (Glacier) una de las líneas Premium de Viña Ventisquero, a través de la máxima expresión del terroir, donde el clima, el suelo y la variedad se conjugan para dar vida a un vino equilibrado y elegante, crianza de 18 meses en barricas francesas, cuidado excepcional en todas las etapas del proceso de elaboración. Comenzamos catando un Carmenere 2010, del Valle de Maipo Costa, de color rojo violeta intenso, con una densidad media alta, aromas a frutos rojos maduros, algo mentolado y especiado, extraordinaria combinación de fruta y madera, con un ataque dulce de entrada, se vuelve redondo en boca, bouquet y taninos educados, muy elegante y larga persistencia en boca. Lo armonizaría con un cordero o un cochinillo en caja china. Pasamos a la línea Ventisquero Vértice, la cual da vida a un ensamblaje único de Carmenere y Syrah, proveniente de la parte más alta del Valle de Apalta, La cosecha es manual y la producción limitada. Con un envejecimiento de 18 meses en barrica y 9 meses en botella. Contiene 51% de Carmenere y 49% de Syrah, un proceso que entrega lo mejor de cada elemento, para dar paso a algo nuevo. De color rojo violeta, con aromas mezclados de frutos rojos y negros maduros, notas suaves de especies como pimienta negra, algunas notas de vainilla y chocolate propias de las barricas, sus taninos son suaves, la acidez está equilibrada, es estructurado y tiene largo final en boca. Es el acompañante perfecto para los platos muy complejos y las comidas muy especiadas como las de la cocina india, thailandesa, mexicana y para las carnes con sabor fuerte como las de cacería. Otro extraordinario vino con mucho para dar. Finalmente llegamos al tope de la noche, de la línea Ventisquero Pangea, degustamos un Syrah 2007, proveniente de la exclusiva zona de Apalta, en el valle de Colchagua, conjuga la visión, experiencia y filosofía de dos destacados enólogos: John Duval, uno de los enólogos más prestigiosos de Australia, y Felipe Tosso, enólogo jefe de Viña Ventisquero. Ambos profesionales volcaron toda su experiencia y creatividad, dando vida a un Syrah excepcional, donde los sabores y aromas se combinan de manera perfecta. Luego de un envejecimiento de 20 meses en barricas de roble francés, lo dejan descansar un año en botella, lo cual le brinda equilibrio y redondez . De un intenso y profundo color rojo, con una mezcla de destellos violetas y granates, aromas a frutos negros maduros y especies, notas de regaliz, cuero, chocolate. Sabores y aromas que combinan de manera perfecta. Con una tanicidad muy elegante, de mucha extracción, con una acidez equilibrada y densidad media alta. Tiene partículas en suspensión, ya que no es filtrado. Es un vino de gran cuerpo y concentración, gracias a una fermentación especial y optima, lo cual lo convierte en un vino de carácter excepcional, el mejor vino de la noche!!

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